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jueves, 4 de enero de 2018

4 de Enero. Madre.

¿Puede acaso una mujer olvidarse del niño que cría, no tener compasión del hijo de sus entrañas? Pues aunque ella lo olvidara, yo no te olvidaría a ti (Isaías 49,15).


Parece que nuestro cerebro, cuando muere, lo borra todo, para dejar sitio a una sola imagen la de la madre. Creo que es justamente así. He oído a ancianos, endurecidos por la vida, morir con ese suspiro: "¡Madre!". Conozco enfermos que han sufrido alguna embolia y son incapaces de hablar pero todavía consiguen exclamar: "¡Madre mía!". 

El deseo de maternidad es desbordante, como demuestran las mujeres que piden a la ingeniería genética un hijo a toda costa. Las pupilas de la hembra de la especie humana se dilatan, instintivamente, de placer a la vista de un niño. No hay experiencia humana más visceral que la maternidad. Basta observar a una madre que sufre por una enfermedad, por un trastorno o por la muerte de un hijo. Es como si se desgarrara algo, al mismo tiempo, en su cuerpo y en su espíritu. 

 A pesar de todo, una madre puede olvidar a su hijo, puede abandonarle en el tren, en el baño de un motel o en el cubo de la basura. 

 Tú, Dios, no. El amor de una madre y el tuyo no resisten comparaciones. 

 Entonces, ¿de qué tener miedo? 

.:*:.Hasta la próxima Ruta, Dios mediante. Bendiciones Infinitas. Paz y Bien..:*:.

miércoles, 3 de enero de 2018

3 de Enero. La paz de Jesús es Jesús.

La paz os dejo, mi paz os doy; no como el mundo la da, os la doy yo (Juan 14,27).


La paz de Jesús es Jesús. No es la frase bonita de catecismo u homilía; es una realidad. Quien le acoge como Hijo de Dios, no puede dejar de acoger en él a todos los hombres y mujeres. Porque en Jesús "no hay judío ni griego, no hay esclavo ni libre, no hay hombre ni mujer, pues todos vosotros sois uno en Cristo Jesús" (Gálatas 3,28). 

El cristiano no tiene enemigos a los que combatir., sino hermanos y hermanas con quienes buscar el diálogo, la verificación, la solución pacífica de los problemas, por más difíciles que puedan ser. 

¿Qué es la paz del mundo? La historia tiene algo que decir. Es el fuerte quien aplasta al débil. Existe el miedo al otro. Y de ahí arranca la carrera de armamentos, la acumulación de armas cada vez más poderosas y terribles. Hay dictaduras (bajo el Soviet, los pueblos del ex imperio estaban... en paz). Se hace la guerra a costa de los pueblos más pobres: la URSS y Estados Unidos se combatían entre sí en Asia, en Medio Oriente, en África. 

"¿Y los cristianos que han sido responsables se guerras más o menos santas, que han bendecido las armas, que...?" 

Han pecado. Tenían a Jesús en los labios, pero no en el corazón. 

Sin Jesús, la paz es sólo una palabra. 

.:*:.Hasta la próxima Ruta, Dios mediante. Bendiciones Infinitas. Paz y Bien..:*:.

martes, 2 de enero de 2018

2 de Enero. La sonrisa de Dios.

Porque yo sé bien los proyectos que tengo sobre vosotros -dice el Señor-, proyectos de prosperidad y no de desgracia, de daros un porvenir lleno de esperanza (Jeremías 29,11).


La sonrisa de Dios es leal y abierta, porque corresponde siempre a los proyectos de su corazón, proyectos de paz y no de desventura. La sonrisa de los hombres y de las mujeres pueden ser falsa y engañosa, porque puede esconder un corazón cargado de proyectos de desdicha. 

La paz se siente estimulada con la sonrisa, las palabras hermosas, las declaraciones que ensalzan, los galanteos y los cortejos, pero brota únicamente de los proyectos del corazón. 

Cuando la sonrisa de la paz no brota de un corazón lleno de proyectos de paz, proliferan los pacifistas violentos, intolerantes y despectivos con todos los que no piensan como ellos, que apoyan a los tirios y odian a los troyanos, que aman a los troyanos y odian a los tirios, que se movilizan alternativamente, que organizan manifestaciones de protesta y en contra. 

Estos pacifistas ocupan las primeras páginas de los periódicos, pero no sirven para un futuro cargado de esperanza. Los que tienen la sonrisa de Dios no están siempre "en contra". De nada. Están "a favor". De todos.

Y actúan como Dios, sin ruido, por un futuro cargado de esperanza, para todos. 


.:*:.Hasta la próxima Ruta, Dios mediante. Bendiciones Infinitas. Paz y Bien..:*:.

lunes, 1 de enero de 2018

1ero de Enero. El Dios que necesitamos.

Que el Señor te bendiga y te guarde. Que el Señor haga resplandecer su rostro sobre ti y te conceda su gracia. Que el Señor vuelva hacia ti su rostro y te conceda la paz. (Números 6,24-26).


Un rostro que resplandece es un rostro que sonríe. En la especie humana, la única que sonríe, es el rostro femenino el que mejor expresa la sonrisa que ilumina y hace resplandecer el semblante. 

Este texto de la Biblia, al tiempo que recuerda que Dios es mujer además de hombre, y madre además de padre, augura a los hombres y las mujeres, un Dios de rostro risueño, bueno, hermoso, materno. 

El Dios que necesitamos. 

La vida sería un peso inaguantable si no encontráramos rostros hermosos y buenos, que nos sonríen. El pensamiento de un Dios que nos mira, en todo el tiempo y lugar, con rostro ceñudo y serio, convertiría nuestra vida en una existencia triste, sería imposible. 

Han sido los hombres quienes han inventado un Dios amenazador y siempre malhumorado. Luego, para librarse de él y sobrevivir, han tenido que recurrir al ateísmo. 

Un Dios que nos mira con un rostro iluminado por una sonrisa femenina, infinitamente hermosa y dulce, que nos da la paz. Ama la paz y la construye solo quien se compromete cada día, al igual que Dios, en ir al encuentro de los demás con un rostro que resplandece. 

.:*:.Hasta la próxima Ruta, Dios mediante. Bendiciones Infinitas. Paz y Bien..:*:.

viernes, 25 de agosto de 2017

Oremos por Venezuela. Estado Aragua.

Te damos gracias, oh Dios, te damos gracias, cuenten tus prodigios los que invocan tu nombre.
"Déjenme fijar la fecha y yo haré el juicio, yo impondré la justicia."
Se derrumba la tierra con sus habitantes, mas yo soy quien afianzó sus columnas.
Digo a los arrogantes: "¡Ya basta de violencias!" y a los incrédulos: "No alcen los cuernos, no levanten tanto la cornamenta ni lancen desafíos contra la Roca".
Pues, he aquí que viene, no del oriente ni del occidente, ni del desierto ni de las montañas, pero sí viene Dios, que es juez, para humillar a unos y ensalzar a otros.
En su mano el Señor tiene la copa de vino espumante y embriagador. La escancia, y la vacían hasta la borra al beberla todos los malos de la tierra.
Yo podía alargarme, no terminaría, cantaré salmos al Dios de Jacob.
Aserruchará los cuernos de los malvados, y se alzarán los cuernos de los justos"
(Salmo 75, 2-11)

Gloria al Padre, y al Hijo y al Espíritu Santo. Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.

.:*:.Hasta la próxima Ruta, Dios mediante. Bendiciones Infinitas. Paz y Bien..:*:.

viernes, 18 de agosto de 2017

Oración por la Paz y la Integridad de la República.

¡Oh Señor y Dios nuestro Jesucristo, amabilísimo Salvador de las almas y Rey de las naciones! Escucha nuestra humilde súplica, perdónanos nuestros pecados y danos la tranquilidad y la paz en tu santo servicio. Aleja de nuestra patria el espíritu de rencor, de discordia y rebelión; compadécete de ella, que te pertenece, pues nos has regenerado a todos con tu sangre preciosísima. Une en tu divino Corazón a todos los venezolanos, y enséñanos a vivir en la luz de tus mandamientos. 

Concédenos que nuestros magistrados gobiernen siempre en tu santo Nombre y conforme a las prescripciones de tu Ley. Haz que las autoridades todas de la República sean verdaderamente cristianas y reconozcan en ti la fuente de sus derechos y de sus deberes: que protejan los intereses  espirituales de las almas redimidas y den en todo tiempo entera libertad a tu Iglesia. 

No permitas¡Oh Dios de las naciones! Que el amado suelo de nuestro país sea presa jamás del invasor extranjero; sino antes bien, haz que se extingan para siempre las causas de nuestras desgracias políticas, a fin de que podamos mantener incólume, con el patrimonio de nuestra fe, el tesoro inapreciable de nuestra soberanía e independencia. 

Haz esto, Señor, a favor nuestro, por la intercesión de la Inmaculada Virgen María y de nuestros santos Patronos, y bendícenos para esta vida y para la eternidad. Amén. 

(Escrita por Mons. Juan Bautista Castro el 27 de febrero de 1899) 

.:*:.Hasta la próxima Ruta, Dios mediante. Bendiciones Infinitas. Paz y Bien..:*:.

jueves, 2 de febrero de 2017

Virgen de la Candelaria. Madre de la Confianza.


Madre siempre fiel, 
cuando te asaltó la incertidumbre, 
cuando las cosas se te hacían complicadas, 
supiste confiar. 
¡Y cómo confiaste! 
En el momento cumbre de la historia 
con decisión y firmeza 
pronunciaste aquel bienaventurado 
"Hágase", del que viene nuestra salud. 
¡Y siempre lo mantuviste! 
Las desconfianzas de otros, 
los decires de tantos 
nunca te apartaron de la santa confianza. 
Obténme, Santa María de la Confianza, 
el auxilio divino que me permita superar 
las incertidumbres que ahora me acosan, 
y que aprenda a dejarme llevar por tu Hijo, 
nuestro Señor Jesucristo
que es la Luz del Mundo
Que así sea. 
Amén. 

Imagen: Programa 2017 Parroquia Nstra. Sra. de la Candelaria. Valencia. 

.:*:.Hasta la próxima Ruta, Dios mediante. Bendiciones Infinitas. Paz y Bien..:*:.

jueves, 12 de enero de 2017

Mi Cristo Roto. ¡¿Quién te partió la cara?!

Cristo Sindónico de Córdoba

Dichosos los que construyen la paz, porque Dios los llamará sus hijos. Mateo 5,9. 

Cristo, yo había oído muchas veces esta amenaza en labios trémulos por el odio:

“¡MIRA QUE TE PARTO LA CARA!” Y siempre pensé que todo suele quedar en un puñetazo, un bofetón, una cuchillada en la mejilla. Sólo en Ti se ha cumplido literalmente la brutal amenaza, te han partido la cara de un solo tajo.

Yo se la hubiera restaurado, pero Él me lo prohibió. Por eso me dedico en un juego de fantasía y cariño, a restaurársela idealmente, colocando sobre su cabeza sin facciones, las caras que para mi Cristo, ha soñado el arte universal. Consumo en este juego, museos, colecciones, galerías, catedrales, pinacotecas. Todo va pasando por el tajo de su cara en un desfile lento, y me siento Velázquez o Juan de Meza, con un patetismo barroco, o Montañés con olímpica belleza, o Leonardo, de infinita tristeza.

Pero desde hace unos días, he tenido que renunciar también al consuelo de este juego, ¡el Cristo roto es terrible en su exigencia!, no concibe treguas, y me lo ha prohibido también. Yo creí al principio que le gustaba, al menos lo toleraba silencioso, hasta que un día me interrumpió severamente:

- ¡BASTA! No me pongas ya más caras, he tolerado tu juego demasiado tiempo. ¿No acabas de comprenderlo? No me pongas más esas caras que pides de limosna, al arte de los hombres. ¡Quiero estar así, sin cara! Prometiste que jamás me restaurarías… a no ser, que quieras ensayar otro juego, ponerme otras caras. Esas… sí las aceptaré.

- ¿Cuáles Señor? Te las pondré enseguida. Dime qué caras y te las pongo.

- Temo que no lo entiendas, incluso que te escandalices como los fariseos... Me refiero a otros rostros, pero reales, no fingidos como los que inventabas, y que son también míos, como el que me cortaron de un tajo.

- Ahh, ya creo adivinar Señor, te refieres a las caras de los santos, de los apóstoles, de los mártires…

- Esas caras en verdad, son mías. Nadie me las niega ni me las regatea. Pero yo quiero otras, las reclamo, muy pocos se atreverían a ponérselas, Yo sí.

Hizo un descanso, como para tomar fuerzas. Respiró profundamente. Yo estaba asustado, tenía miedo, pero no había remedio. Entonces me dijo:

- Oye, ¿No tienes por ahí un retrato de tu enemigo? De ese que te tiene envidia y que no te deja vivir; del que interpreta mal por sistema todas tus cosas, del que siempre va hablando mal de ti, del que te arruinó, del que dio malos y decisivos informes sobre ti, del traidor que te puso una zancadilla, del que logró echarte del puesto que tenías, del que te denunció, del que te metió en la cárcel...

- Cristo, ¡no sigas!

- Es demasiado, ¿Verdad?

- Es inhumano, es absurdo…

- ¿Te has fijado bien en la cara de los leprosos, de los anormales, de los idiotizados, de los mendigos sucios, de los imbéciles, de los locos...?

- ¿Y...? ¿Y me vas a decir Cristo, que esas caras son tuyas y… y que te las ponga? No, no, imposible.

- ¡Espera! no acabo aún... Toma bien nota de esta última lista y no olvides ningún rostro: Tienes que ponerme la cara del blasfemo, del suicida, del degenerado, del ladrón, del borracho, del asesino, del criminal, del traidor, del vicioso. ¿No has oído?

¡Necesito que pongas todos esos rostros sobre el mío!

- …No, no Señor… -contesté— ¡No entiendo nada! ¿Todos esos rostros miserables y corruptos sobre el tuyo, sagrado y divino?

- ¡Sí, así lo quiero! ¿No ves que todos ellos pertenecen a esta pobre humanidad doliente creada por mi padre? ¿No te das cuenta que yo he dado la vida por todos?

Quizá ahora comprendas lo que fue la Redención.

Escucha: Yo, como hijo de Dios, me hice responsable voluntariamente de todos los errores y pecados de la humanidad. Todo pesaba sobre Mí, mi Padre se asomó desde el cielo para verme en la cruz y contemplarse en Mi rostro, clavó sus ojos en Mí y su pasmo fue infinito. Sobre mi rostro, vio sobrepuesta sucesiva y vertiginosamente las caras de todos los hombres. Desde el cielo, durante aquellas tres horas terribles de mi agonía en la cruz, contemplaba el desfile trágico de la humanidad vencida, mientras tanto Yo le decía:

“¡Padre, perdónalos porque no saben lo que hacen!” No era Yo sólo quien moría en la cruz, eran miles y miles de dolientes seres humanos, derrotados muchos por sus propias pasiones, por sus errores, por sus pecados. El desfile era terrible, repugnante, grosero. Mi Padre vio pasar sobre mi rostro la cara del soberbio; la del sectario, imaginando la destrucción de Dios, la del asesino frío y desalmado...

Había labios repugnantes, ojeras hundidas marcadas con fuego de lujuria, alientos insoportables de ebriedad, palidez de madrugadas encenagadas en el vicio, sórdidos rictus de amargura y desesperación, turbadoras miradas de perversión y delito, de subterráneas anormalidades inconfesables y oscuras. Toda la derrota y las lacras de una humanidad irredenta, la agonía, la muerte. Y mi Padre… Dios, las amó a todas y perdonó sus pecados”.

Mi Cristo calló, qué pobre y ridículo me pareció el arte de los hombres y qué profundo e insondable el amor de Dios. Y desde entonces, enmudeció. No volvió a hablarme más.

No olvidemos nunca esta suprema y difícil lección. No olvidemos nunca la superficie lisa del rostro de mi Cristo, tajado verticalmente. Podríamos compararlo con un portarretrato vacío. En él se nos ofrece la oportunidad de colocar la cara de aquél o aquellos que nos han hecho daño o que odiamos profundamente, haciéndonos más daño a nosotros mismos que a quien es objeto de nuestro rencor.

¡Sí…, sí, seamos valientes! Recordemos el rostro que mayor odio y antipatía nos produzca, acerquémoslo a Cristo, aunque sintamos temblar nuestro pulso. Coloquémoslo sobre el suyo e imaginemos que nuestro enemigo, ese ser que odiamos, ocupa su lugar en la cruz. Cerremos los ojos, acerquémonos al crucificado y besemos reverentes y humildes su figura.

Al besar un Cristo, con el rostro de nuestro enemigo, nos envolverá una voz cálida y musical, paternal y bondadosa. Aquélla que hace muchos siglos nos dejara la más grande y maravillosa herencia que hombre alguno pueda tener, encerrada en sólo seis sencillas palabras:
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“Amaos los unos a los otros”... 

.:*:.Hasta la próxima Ruta, Dios mediante. Bendiciones Infinitas. Paz y Bien..:*:.

martes, 10 de enero de 2017

Mi Cristo Roto. Se ha perdido una Cruz.

Realiza cada una de tus acciones como si fuera la última de tu vida. Marco Aurelio. 

¡Atención! Se ha perdido una cruz y no se da con ella, es la de mi Cristo roto. ¿Alguno de vosotros, ha encontrado una cruz? ¿Queréis las señas? ¿El tamaño? No es muy grande, pero es una cruz y no hay cruz pequeña, además es una cruz para Cristo y entonces no hay modo de medirla, con estas señas basta porque en definitiva todas las cruces son iguales.

Perdonad pues mi insistencia, ¿Quién de nosotros no ha encontrado una cruz? Mejor dicho: ¿Quién no tiene una cruz? Es un derecho de propiedad irrenunciable que se está ejerciendo siempre, todos la llevamos. La llevamos encima, a cuestas, aunque no se nos vea, aunque sonriamos.

A veces por oculta, es más pesada. Esta noche al acostarnos, no podremos dejarla colgada en la percha, al levantarnos mañana, no será necesario vestírnosla, saltaremos de la cama con ella ya puesta.

¿Que quién ha encontrado una cruz? Todos… todos, buenos y malos, santos y criminales, sanos y enfermos, ni siquiera respeta a los que parecen desafiar el dolor con las carcajadas y juergas de su vida.

Esa pobre mujer, que repintada y aburrida espera sentada a la barra de la cafetería o arrimada a la esquina estratégica, lleva una pavorosa cruz a cuestas, pesa tanto, que se apoya recostándose en la esquina, es una cruz más pesada de lo que sospechamos y el que se acerca a ella buscando el placer, lo hace por huir de otra cruz. Hablan los dos, regatean, prometen, se arreglan al fin y allá van por la calle adelante, con prisa y con la cruz a cuestas, y cuando regresan, cuando ya han tratado de aplacar su hambre de felicidad, sienten defraudados que ha aumentado su cruz, que es mayor. En ella, asco y envilecimiento, en él, desolación.

Toda ciudad en definitiva es un bosque, una selva, una colmena de cruces, ¿Y sabes amigo por qué a veces nuestra cruz resulta intolerable? ¿Sabes por qué llega a convertirse en desesperación y suicidio? Porque entonces nuestra cruz, es una cruz sola, sin Cristo, solamente se puede tolerar cuando lleva un Cristo entre sus brazos.

Una cruz laica, sin sangre ni amor de Dios, es absurda, no tiene sentido, por eso, se me ocurre una idea: Yo tengo un Cristo sin cruz y tú tienes, tal vez, una cruz sin Cristo. Los dos están incompletos. Mi Cristo no descansa, porque le falta su cruz, tú no resistes tu cruz porque te falta Cristo. ¿Por qué no le das esta noche tu cruz vacía al Cristo? Tú tienes una cruz sola, vacía, helada, negra, sin sentido. Te comprendo, sufrir así es irracional y no me explico ¿Cómo has podido tolerarla tanto tiempo? Tienes el remedio en tus manos… anda, dame esa cruz tuya, dámela, te doy en cambio, este Cristo sin reposo y sin cruz. Tómalo, es tuyo, dale tu cruz, toma mi Cristo; júntalos, clávalos, abrázalos y todo habrá cambiado.

Mi Cristo roto descansa en tu cruz, tu cruz se ablanda con mi Cristo en ella. Hemos encontrado una cruz, la nuestra, que resulta ser la de Cristo... 

.:*:.Hasta la próxima Ruta, Dios mediante. Bendiciones Infinitas. Paz y Bien..:*:.

sábado, 7 de enero de 2017

Mi Cristo Roto. Dios tiene mano izquierda.

"No debemos cansarnos de ayudar a nuestro prójimo, porque en ellos servimos a Jesús".

La misma tarde que compré mi Cristo, le pregunté al anticuario dónde estaría el brazo derecho. 

- ¡Oh, imposible encontrarlo! –me contestó— Y no crea usted que no revolvimos ya todo el pajar en donde estaba tirada la imagen mutilada. Encontramos, eso sí, la pierna izquierda y se la pegamos pero de la mano derecha ¡Ni rastro!

El anticuario no sabía Señor por dónde andaba tu mano derecha, pero Tú, Tú sí que lo sabes, la estás desclavando continuamente y se te escapa siempre. No, no me extraña que no la tengas, anda por ahí, invisible pero eficaz.

¡¿Quién no siente de vez en cuando, el suave roce de la mano llagada de Cristo?! Esa mano invisible que, sin llamar a la puerta, se mete en todas partes; en el hospital, en el lecho de muerte, en la oficina, en el despacho, en la fábrica, en el cine, en el teatro. Se cuela de puntillas como una ráfaga luminosa y musical. No podemos dar un paso por la vida sin tropezar con la mano de Dios. Pero tú, Cristo mío roto, sólo tienes mano izquierda.

Y me imaginé que decía, después de sentir que mi Cristo sonreía silencioso: “Qué poco y mal me conocéis, ¿Qué sería de vosotros los hombres si yo no tuviera mano izquierda?, La tengo, pero no para evitar que me crucifiquen, sino para conseguir que mi padre no os condene, Yo no uso mi mano izquierda para salvarme de la cruz, sino para salvaros del infierno, ¿Lo comprendes ahora?”

Toda la aventura trágica y divina de nuestra vida, está en dejarnos guiar por las manos de Dios. Pero hay en nosotros un elemento difícil, esquivo, peligroso: la libertad. Y Dios la respeta misteriosamente, infinitamente.

Para conquistarnos dispone Dios de dos manos, la derecha y la izquierda que representan dos técnicas y dos tácticas. La mano derecha es clara, abierta, transparente, luminosa. La mano izquierda busca atajos, da rodeos, es cálculo, diplomacia, no tiene prisa, si es necesario actúa a distancia y finge la voz, pero aunque izquierda no es maquiavélica ni traidora, porque la mueve el amor.

Para cada alma Dios tiene dos manos, pero las emplea de modo distinto porque todas las almas son diferentes. Con la derecha, como a palomas blancas o a ovejas dóciles,

Dios guiaba a Juan Evangelista, a Francisco de Asís, a Juan de la Cruz, a Francisco Javier, a las dos Teresas...

Para conquistar a Pedro, a Pablo, a Magdalena, a Agustín, a Ignacio de Loyola, Dios tuvo que emplear la izquierda. Ante la mano derecha, se rebelan, entonces entra en juego la izquierda, busca un disfraz y se trueca en rayo, en bala, trata de ser freno que nos detenga, quiere alzarnos del barro en que caímos, se nos mete en el pecho para ver si logra ablandar nuestros corazones. Sus recursos son infinitos, hoy la disimula con modernos y actuales disfraces, es el ser más actual...

¡Se rompe una presa que arrastra mis fincas! Tengo un descuido inexplicable en el trabajo, y la máquina me siega un brazo. Íbamos en coche a 100 por hora, nos salió inesperadamente un camión, murieron en el acto mi mujer y un hijo, y quedé solo en la vida. Jamás he tenido una enfermedad, pero me dice el médico que tengo algo incurable...

Ante la mano izquierda de Dios, la primera reacción es un grito de rebeldía y desesperación, olvidamos la presa, el coche, el traidor, la muerte, porque adivinamos que ellos no tienen en definitiva la culpa, presentimos a Dios como responsable de ese dolor, que por ser tan terriblemente profundo, no puede venir de las criaturas y lógicamente nos encaramos a Dios. ¡Le gritamos, le emplazamos, le protestamos, le exigimos, le desafiamos, le condenamos! “¡PADRE…! ¡SI FUERAS PADRE, NO ME TRATARÍAS ASÍ!” Gritamos, protestamos, nos rebelamos y luego… nos quedamos solos.

Y vienen las primeras lágrimas nerviosas y quemantes, y sin darnos cuenta, la primera oración. Volvemos a protestar contra Dios, contra nuestra primera oración... Sucede el cansancio, las lágrimas ya son más serenas, ya rezamos sin protestar, tenemos ganas de besar algo, ¿Qué? Oh sí, eso, ya lo encontramos, un crucifijo, y con un beso le decimos a Dios, que está bien lo que Él disponga...

Terrible, violenta, dura, implacable, pero bendita mano izquierda de Dios. Se formulan absurdas expresiones: “Bendita presa que se rompió, arrasó mi fábrica, pero me acercó a Dios, yo andaba muy lejos de Él”.

Cristo mío roto, te lo digo en nombre mío y de todos, porque todos somos valientes para pedírtelo desde ahora: Señor, si no basta para salvarnos la ternura de tu mano derecha, desclava tu izquierda, disfrázala de lo que quieras: fracaso, calumnia, ruina, accidente, muerte. Cristo, que seamos hijos de tu mano, de tu derecha o de tu izquierda.

A la cabecera de tu cama, amigo, o en tu mesita de noche, tienes un Cristo clavado en la cruz, ¿Por qué esta noche, antes de acostarte, no le besas la mano izquierda? Dios sabrá compensarte ese gesto de valor y resignación cristiana. 

.:*:.Hasta la próxima Ruta, Dios mediante. Bendiciones Infinitas. Paz y Bien..:*:.

viernes, 6 de enero de 2017

Mi Cristo Roto. Compraventa de Cristos.

Agradece a la llama su luz, pero no olvides el pie del candil que, constante y paciente, la sostiene en la sombra. R. Tagore.

A mi Cristo roto lo encontré en Sevilla. Dentro del arte me subyuga el tema de Cristo en la cruz. Se llevan mi preferencia los cristos barrocos españoles. La última vez, fui en compañía de un buen amigo mío. Al Cristo, ¡Qué elección! Se le puede encontrar entre tuercas y clavos, chatarra oxidada, ropa vieja, zapatos, libros, muñecas rotas o litografías románticas. La cosa, es saber buscarlo. Porque Cristo anda y está entre todas las cosas de este revuelto e inverosímil rastro que es la Vida.

Pero aquella mañana nos aventuramos por la casa del artista, es más fácil encontrar ahí al Cristo, ¡Pero mucho más caro!, es zona ya de anticuarios. Es el Cristo con impuesto de lujo, el Cristo que han enriquecido los turistas, porque desde que se intensificó el turismo, también Cristo es más caro.

Visitamos únicamente dos o tres tiendas y andábamos por la tercera o cuarta.

- Ehhmm ¿Quiere algo padre?

- Dar una vuelta nada más por la tienda, mirar, ver.

De pronto… frente a mí, acostado sobre una mesa, vi un Cristo sin cruz, iba a lanzarme sobre él, pero frené mis ímpetus. Miré al Cristo de reojo, me conquistó desde el primer instante. Claro que no era precisamente lo que yo buscaba, era un Cristo roto. Pero esta misma circunstancia, me encadenó a Él, no sé por qué. Fingí interés primero por los objetos que me rodeaban hasta que mis manos se apoderaron del Cristo, ¡Dominé mis dedos para no acariciarlo! No me habían engañado los ojos… no. Debió ser un Cristo muy bello, era un impresionante despojo mutilado. Por supuesto, no tenía cruz, le faltaba media pierna, un brazo entero, y aunque conservaba la cabeza, había perdido la cara.

Se acercó el anticuario, tomó el Cristo roto en sus manos y…

- Ohhh, es una magnífica pieza, se ve que tiene usted gusto padre, fíjese que espléndida talla, qué buena factura…

- ¡Pero… está tan rota, tan mutilada!

- No tiene importancia padre, aquí al lado hay un magnífico restaurador, amigo mío y se lo va a dejar a usted, ¡Nuevo!

Volvió a ponderarlo, a alabarlo, lo acariciaba entre sus manos, pero… no acariciaba al Cristo, acariciaba la mercancía que se le iba a convertir en dinero.

Insistí, dudó, hizo una pausa, miró por última vez al Cristo fingiendo que le costaba separarse de Él y me lo alargó en un arranque de generosidad ficticia, diciéndome resignado y dolorido:

- Tenga padre, lléveselo, por ser para usted y conste que no gano nada 3000 pesetas nada más, ¡Se lleva usted una joya!

El vendedor exaltaba las cualidades para mantener el precio. Yo, sacerdote, le mermaba méritos para rebajarlo… Me estremecí de pronto. ¡Disputábamos el precio de Cristo, como si fuera una simple mercancía! Y me acordé de Judas… ¿No era aquella también una compraventa de Cristo? ¡Pero cuántas veces vendemos y compramos a Cristo, no de madera, de carne, en él y en nuestros prójimos! Nuestra vida es muchas veces una compraventa de cristos.

Bien… cedimos los dos… lo rebajó a 800 pesetas. Antes de despedirme, le pregunté si sabía la procedencia del Cristo y la razón de aquellas terribles mutilaciones. En información vaga e incompleta me dijo que creía procedía de la sierra de Arasena, y que las mutilaciones se debían a una profanación en tiempo de guerra.

Apreté a mi Cristo con cariño… y salí con Él a la calle. Al fin, ya de noche, cerré la puerta de mi habitación y me encontré solo, cara a cara con mi Cristo. Qué ensangrentado despojo mutilado, viéndolo así me decidí a preguntarle:

- Cristo, ¡¿Quién fue el que se atrevió contigo?! ¡¿No le temblaron las manos cuando astilló las tuyas arrancándote de la cruz?! ¿Vive todavía? ¿Dónde? ¿Qué haría hoy si te viera en mis manos? …¿Se arrepintió?

– ¡CÁLLATE!— me cortó una voz tajante.

- ¡CÁLLATE, preguntas demasiado! ¡¿Crees que tengo un corazón tan pequeño y mezquino como el tuyo?!

¡CÁLLATE! No me preguntes ni pienses más en el que me mutiló, déjalo, ¿Qué sabes tú? ¡Respétalo!, Yo ya lo perdoné. Yo me olvidé instantáneamente y para siempre de sus pecados. Cuando un hombre se arrepiente, Yo perdono de una vez, no por mezquinas entregas como vosotros.

- ¡CÁLLATE! ¿Por qué ante mis miembros rotos, no se te ocurre recordar a seres que ofenden, hieren, explotan y mutilan a sus hermanos los hombres? ¿Qué es mayor pecado? Mutilar una imagen de madera o mutilar una imagen mía viva, de carne, en la que palpito Yo por la gracia del bautismo. ¡Ohh hipócritas! Os rasgáis las vestiduras ante el recuerdo del que mutiló mi imagen de madera, mientras le estrecháis la mano o le rendís honores al que mutila física o moralmente a los cristos vivos que son sus hermanos.

Yo contesté: “No puedo verte así, destrozado, aunque el restaurador me cobre lo que quiera ¡Todo te lo mereces! Me duele verte así. Mañana mismo te llevaré al taller.

¿Verdad que apruebas mi plan? ¿Verdad que te gusta?”

- ¡NO, NO ME GUSTA!— Contestó el Cristo, seca y duramente.

- ¡ERES IGUAL QUE TODOS Y HABLAS DEMASIADO!

Hubo una pausa de silencio. Una orden, tajante como un rayo, vino a decapitar el silencio angustioso:

- ¡NO ME RESTAURES, TE LO PROHIBO! ¡¿LO OYES?!

- Si Señor, te lo prometo, no te restauraré.

- Gracias— me contestó el Cristo. Su tono volvió a darme confianza.

- ¿Por qué no quieres que te restaure? No te comprendo. ¿No comprendes Señor, que va a ser para mí un continuo dolor cada vez que te mire roto y mutilado? ¿No comprendes que me duele?

- Eso es lo que quiero, que al verme roto te acuerdes siempre de tantos hermanos tuyos que conviven contigo; rotos, aplastados, indigentes, mutilados. Sin brazos, porque no tienen posibilidades de trabajo. Sin pies, porque les han cerrado los caminos. Sin cara, porque les han quitado la honra. Todos los olvidan y les vuelven la espalda. ¡No me restaures, a ver si viéndome así, te acuerdas de ellos y te duele, a ver si así, roto y mutilado te sirvo de clave para el dolor de los demás! Muchos cristianos se vuelven en devoción, en besos, en luces, en flores sobre un Cristo bello, y se olvidan de sus hermanos los hombres, cristos feos, rotos y sufrientes.

Hay muchos cristianos que tranquilizan su conciencia besando un Cristo bello, obra de arte, mientras ofenden al pequeño Cristo de carne, que es su hermano. ¡Esos besos me repugnan, me dan asco!, Los tolero forzado en mis pies de imagen tallada en madera, pero me hieren el corazón. ¡Tenéis demasiados cristos bellos! Demasiadas obras de arte de mi imagen crucificada. Y estáis en peligro de quedaros en la obra de arte.

Un Cristo bello puede ser un peligroso refugio donde esconderse en la huida del dolor ajeno, tranquilizando al mismo tiempo la conciencia, en un falso cristianismo. Por eso ¡Debieran tener más cristos rotos, uno a la entrada de cada iglesia, que gritara siempre con sus miembros partidos y su cara sin forma, el dolor y la tragedia de mi segunda pasión, en mis hermanos los hombres! Por eso te lo suplico, no me restaures, déjame roto junto a ti, aunque amargue un poco tu vida.

- Si Señor, te lo prometo— contesté. Y un beso sobre su único pie astillado, fue la firma de mi promesa. Desde hoy… viviré con un Cristo roto. 

Mi Cristo roto es un libro de poemas escrito en 1963 por el sacerdote jesuita Ramón Cué Romano que narra el aprendizaje y aventura con una cruz con Cristo mutilado comprada a un anticuario de Sevilla. El libro es considerado una parábola. 



.:*:.Hasta la próxima Ruta, Dios mediante. Bendiciones Infinitas. Paz y Bien..:*:.

sábado, 18 de junio de 2016

De qué lado estamos de verdad...

El Señor es la fuerza de su pueblo, defensa y salvación para su Ungido. Sálvanos, Señor, vela sobre nosotros y guíanos siempre (Cfr. Sal 27,8-9.

La Palabra de Dios nos invita hoy a discernir bien de qué lado estamos de verdad: A favor de la injusticia, el odio y la maldad, o de la justicia, la convivencia y la paz.

El segundo libro de las Crónicas (24, 17-25) advierte que todos podemos caer bajo el abuso de poder.

El gobierno de Joás empezo bien. Su gestión se produjo inicialmente en bienestar para todos, pero tras el populismo, el afán de poder y los beneficios propios de la adulación, entraron en decadencia, y hasta propició falsas creencias. "El Señor les envió profetas para que se arrepintieran, pero no hicieron caso a sus amonestaciones".

No obstante, persiste este rey en su insensatez, hasta el punto de dar muerte al profeta Zacarías por denunciar sus atrocidades. En su cerrazón, conduce a su pueblo rumbo al fracaso.

¿Qué tiene el poder mal empleado que envilece, desquicia y produce muerte? Tiene en sus entrañas egoísmo, avaricia y maldad. El exceso de poder genera prepotencia, encubra a las personas, las saca de la realidad, terminan creyéndose Dios.

El Evangelio de Mateo (6, 24-34) plantea la necesidad de afianzarnos en Dios y no en el tener. 

Jesús nos dice: "Nadie puede servir a dos amos, porque odiará a uno y amará al otro, o bien obedecerá al ´primero y no hará caso al segundo.  En resumen, no pueden ustedes servir a Dios y al dinero". Con ello nos pide crecer en la grandeza como camino de sanación, liberación y autenticidad.

Todos tenemos multiples fuentes de seguridad. En estas destacan el tener, la imagen y el poder. Aspectos que, si se desordenan, terminan causando dolor, tristezas y muertes, porque nos introducen en una espiral de competencias, avaricia y maldad de las que no se sale con facilidad.

Jesús nos dirá que no gastemos nuestro ingenio en lo que perece. ¿Cómo vamos a gastarnos mezquinamente en nosotros mismos cuando la gente padece hambre, soledad e indefensión? 
Que a nosotros nos ocupe totalmente Dios, la convivencia humana y la justicia. Lo demás nos vendrá por añadidura. 

P. Gustavo Albarrán, sj.

 
 
 .:*:.Hasta la próxima Ruta, Dios mediante. Bendiciones Infinitas. Paz y Bien..:*:.

jueves, 2 de junio de 2016

Una obra de arte.

Un día Pilatos preguntó a Jesús: 
¿Qué es la verdad? 
Y no sabemos si Jesús no quiso 
responderle o aquel hombre no 
hubiese sido capaz de entender 
la respuesta de Jesús. 
También un discípulo preguntó a 
su maestro "¿Qué es la verdad?" 
Y éste le respondió: 
"La respuesta es tu respuesta 
a cada día de tu vida"
Pero el discipulo no estaba de 
acuerdo con la respuesta. 
"Pero en la vida de cada día 
sólo encuentro rutina y 
mediocridad y no veo 
la verdad por ninguna parte"
Y el maestro respondió: 
"Ahí está la diferencia, que unos 
ven la verdad en cada una de 
sus acciones y otros no la ven"
 
Nuestra vida es un bloque de mármol, 
en el que cada uno de nosotros 
trabajamos cada día 
para esculpir la obra de arte 
que está encerrada en el mármol. 

Hasta la próxima Ruta, Dios mediante. Bendiciones Infinitas. Paz y Bien.

martes, 1 de abril de 2014

Un año para cultivar valores. Abril: Logros.

 
Si quieres lograr algo, 
pon todo tu empeño en ello. 
 
Todo lo que viniere a la mano para hacer, 
hazlo según tus fuerzas (Eclesiastés 9:10). 
 
 
 Súplica por Venezuela
Doris Guerrero. 
 
Señor escucha mi suplica, Dios mio tu eres mi Dios escucha mi oración, esconde a los malvados de sus planes secretos libramos de la conspiración de los malvados que afilan su lengua como espada y lanzan como espadas palabras venenosas. Desde el escondite disparan contra el inocente, disparan por sorpresa y sin temor. Se animan entre si a hacer lo malo, planean poner trampas escondidas y piensan que nadie podrá verlos, que nadie investigará sus maldades. Pero aquel que puede conocer los pensamientos más íntimos del hombre hará investigación. Dios los herirá con sus flechas, los herirá por sorpresa caerán por sus propias palabras y quienes los vean se burlarán de ellos. Todos entonces honraran al Señor y hablaran de sus acciones, comprenderán lo que él ha hecho. El hombre bueno se alegrará en el Señor y buscará protección en él y todos los hombres honrados se sentirán satisfechos. Señor Dios que reine la paz, el amor, la unión en nuestro país Venezuela que tanto lo necesita que cese el odio toca el corazón de todos los que habitamos este hermoso país, la Virgen Santísima con advocación de todas las Vírgenes toquen con su manto pasa por cada rincón, cada esquina, arriba, debajo, adelante, detrás en el norte, sur, este, oeste impregna de amor a Venezuela que tanto lo necesita, y mi amada naturaleza que tanto la han destruido envuélvela con amor, mucha luz, Madre Santa intercede ante nuestro Padre. Amén. Asì sea. 
LO SIENTO PERDÓNAME GRACIAS TE AMO AMADA VENEZUELA.
 
 .:*:.Hasta la próxima sonrisa.:*:. 
*.*Dios mediante*.* 
-*-Bendiciones infinitas-*- 
.*.Se les quiere mucho.*. 
✿♥✿♥✿ 

martes, 30 de julio de 2013

Oración del (la) Guerrero(a) de Dios.


Padre Celestial, 
Tu Guerrero(a) se prepara para la batalla. 
¡Hoy venceré sobre Satanás y su legión de espíritus infernales, 
luciendo la armadura de Dios nuestro Señor! 

Me pongo el Cinturón de la Verdad. 
Permaneceré firme en la verdad de tu Palabra 
para nunca ser víctima de las mentiras de Satanás. 

Me pongo la Coraza de Justicia. 
Que guardará mi corazón del mal, 
así estoy protegido(a) bajo la Sangre de Nuestro Señor Jesucristo. 

Me pongo los Zapatos de la Paz.
Para permanecer firme en la Buena Nueva del Evangelio 
y entonces Tu paz brillará a través de mí 
y será una luz para todos los que me encuentre. 

Tomo el Escudo de la Fe.
Para que yo pueda estar listo(a) para recibir los dardos 
de fuego de Satanás que son la duda, la negación y el engaño, 
y ninguno de ellos me hará ningún daño, 
jamás seré vulnerable a la derrota espiritual. 

Me pongo el Yelmo de Salvación. 
Para mantener mi mente enfocada en Dios 
y que Satanás no haga una fortaleza en mis pensamientos. 

Tomo la Espada del Espíritu. 
Que la espada de doble filo de tus palabras, 
esté lista en mis manos y 
pueda vencer a las palabras tentadoras de Satanás. 

Por la fe, tu guerrero(a) se ha puesto la 
Armadura entera de Dios.
Estoy dispuesto(a) a ganar este día la victoria espiritual. 
Amén. 
Armadura de Dios
  
PD: Les mando un abrazote y Bendiciones Infinitas a tod@s l@s suscritores(as) del blog; especialmente a mis amad@s amig@s Letty Gómez, Alvaro Rojas, Francisco García y Chile Pito, que siempre están pendientes de las publicaciones y de esta servidora. Dios les Bendiga. Se les quiere.

.:*:.Hasta la próxima sonrisa.:*:. 
*.*Dios mediante*.* 
-*-Bendiciones infinitas-*- 
.*.Se les quiere mucho.*. 
✿♥✿♥✿ 

miércoles, 3 de julio de 2013

Un año para cultivar valores. Julio: Sabiduría.

 
Algunos de los pesares 
más grandes de la vida 
provienen de oportunidades 
desaprovechadas y de 
riesgos que no estuvimos 
dispuestos a correr. 

Si alguno de vosotros tiene falta de 
sabiduría, pídala a Dios, el cual da a todos 
abundantemente (...), y le será dada. 
Santiago 1:5. 

 .:*:.Hasta la próxima sonrisa.:*:. 
*.*Dios mediante*.* 
-*-Bendiciones infinitas-*- 
.*.Se les quiere mucho.*. 
✿♥✿♥✿ 

martes, 30 de abril de 2013

Oración por las Vocaciones Sacerdotales.

 
Señor Jesús, que te hiciste en 
el Pesebre nuestro Hermano, en la 
Cruz nuestra Victima y en la Cena 
nuestro Pan, para ser en la Gloria 
nuestra Corona; a pesar de tenerte 
tanto tiempo entre nosotros, todavía 
no te conocemos. 

Enséñanos a amarte para que 
aprendamos a conocerte, porque 
conocerte y amarte es la primera 
razón de nuestras vidas. 

Enseña esta lección a todos 
nuestros hombres, mujeres y 
niños. Llama al sacerdocio desde 
tu Eucaristía a muchos de nuestros 
hijos y hermanos para que sean 
ministros de tu Palabra, de tu Perdón 
y de tu Cuerpo Sacramento, y así 
no nos faltará el Sagrario donde tú 
velas de día y de noche, a fin de que 
seamos felices en la vida y eternamente 
felices en tu Gloria. 
Amén. 

 .:*:.Hasta la próxima sonrisa.:*:. 
*.*Dios mediante*.* 
 -*-Bendiciones infinitas-*- 
.*.Se les quiere mucho.*. 
✿♥✿♥✿ 

jueves, 18 de abril de 2013

Pasos de la lectura orante del Evangelio.

 Iniciar invocando la luz del 
Espíritu Santo. Tomar la Biblia 
y leerla con la convicción 
de que Dios te habla. 

 Lectura. 
¿Qué dice el texto? 
Lectura lenta y atenta del texto. 
Momento de silencio interior 
para recordar lo que se ha leído. 
 
Ampliar la visión, 
relacionando el texto 
con otros pasajes bíblicos. 
 
Meditación. 
¿Qué te dice el texto?
Reflexionar, rumiar, 
profundizar, y repetir las 
palabras significativas. 

Oración. 
¿Qué me hace el texto decirle a Dios? 
Aplicar el mensaje al hoy, 
actualizarlo y llevarlo a la vida. 

 Conversar con Dios. 
Responder a sus interpelaciones. 

Actitud de adoración, súplica, 
alabanza, agradecimiento, 
perdón, ofrecimiento. 

Contemplación. 
¿Qué me hace sentir el texto? 
Ver la realidad con los ojos 
de Dios. Sumergirse en su 
misterio y saborearlo... 

Formular un compromiso. 
¿Qué voy hacer para vivir 
hoy esta Palabra? 
Escoger una frase como resumen 
para memorizar y recordar. 

 .:*:.Hasta la próxima sonrisa.:*:. 
*.*Dios mediante*.* 
-*-Bendiciones infinitas-*- 
.*.Se les quiere mucho.*. 
✿♥✿♥✿ 

domingo, 7 de abril de 2013

Oración a Jesús de la Divina Misericordia por la patria. Venezuela.

 Jesús Misericordiosísimo. 
Te pido por la intercesión de Tus Santos y, especialmente, 
por la intercesión de Tu Amadísima Madre, 
que te crió desde la niñez, 
te ruego bendigas a mi patria Venezuela 
(decir el nombre de la patria que se desea encomendar). 
Jesús, no mires nuestros pecados, 
sino las lágrimas de los niños pequeños, 
el hambre y el frío que sufren. 
Jesús, en nombre de estos inocentes, 
concédeme la gracia que te pido para mi patria Venezuela 
(decir el nombre de la patria que se desea encomendar 
y pedir la gracia que se desea obtener para la patria). 
Amén. 

En aquel instante vi al Señor Jesús con los ojos llenos de lágrimas y me dijo: 
"Ves, hija mía, cuánta compasión les tengo; 
debes saber que son ellos los que sostienen el mundo". 
(Diario, 286). 

.:*:.Hasta la próxima sonrisa.:*:. 
*.*Dios mediante*.* 
-*-Bendiciones infinitas-*- 
.*.Se les quiere mucho.*. 
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